Bhakta Bruno, de Zagreb (Croacia), tenía 18 años cuando conoció a un testigo de Jehová que distribuía revistas en la calle. El título decía: «¿Quién dirige el mundo, Dios o Satanás?»

Bruno se interesó y atendió algunos de sus encuentros. Cierta vez, hicieron un curso para discutir cómo contraatacar elementos y argumentos contrarios.

Uno de los temas principales era la reencarnación y los Hare Krishnas. A Bruno le atrajo el tema y, cuando volvió a su casa, encontró La ciencia de la autorrealización en un estante, que nunca había notado.

Después de leer el libro y discutirlo con los otros testigos de Jehová, concluyó que debería ir al encuentro de los Hare Krishna en su ciudad. En menos de un año, entró al ashram de brahmacharis y comenzó a distribuir libros durante los festivales mensuales de sankirtana

Su servidor,

Suvarna-bindu Dasa

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Comentario de Vijaya Dasa (Ministro de Sankirtana en ISKCON)

Los testigos de Jehová le introdujeron a los Hare Krishna, aunque fuera de una manera poco favorable (o eso pensaron ellos). Krishna tiene Su plan, y ellos tienen el suyo. El plan de Krishna siempre es mejor, así que, sin saberlo, los testigos se convirtieron en el vartma padarsika guru de Bruno. Al llevarlo hacia los devotos, ellos ganaron crédito piadoso sin saberlo, o ajñata sukriti.

Hace muchos años, conocí a una señora en el aeropuerto de Los Ángeles que también había acudido a las reuniones de los testigos de Jehová. Ella me contó que criticaban a los Hare Krishnas con frecuencia. 

«Lo hacían tan a menudo que acabé pensando que tal vez los devotos tenían algo más que ofrecer, ya que los testigos les tenían tanto miedo. Conocí a algunos devotos y visité el templo; me parecieron amables y mucho más astutos filosóficamente. Así que ahora me siento más inclinada a volverme una devota de Krishna».

Dio una donación a cambio del Bhagavad-gita. Entonces nos reímos acerca de cuánto habían intentado mantenerla lejos de los Hare Krishna y ahora se estaba convirtiendo en una de ellos. Consiguieron lo contrario.

Categorías: Historias

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