Mientras distribuía libros en una mesa en la universidad local, tenía una de las guirnaldas de Sri Sri Rukmini Dwarkadish (las Deidades de Los Ángeles) sobre la mesa de libros. La guirnalda atrajo a las personas con sus hermosos colores y fragancia. Llamó particularmente la atención de una oficial de seguridad.
Ella estaba tan atraída a la guirnalda que se acercó rápidamente y dijo:
―¿Dónde conseguiste esto? ¡Es hermoso!
Le dije que era de nuestro templo… ¡y que ahora era para ella! Se la puse por sobre su cabeza. Estaba sorprendida:
―No, no, no la puedo usar ―dijo―. No la merezco.
―Por supuesto que sí ―le dije.
Ella estaba tan feliz que la usó por el resto del día y compró algunos libros de Srila Prabhupada.
Otro día estaba en la universidad mientras se llevaba a cabo un reclutamiento de policías. Vi que algunos oficiales de policía que llevaban armas se acercaban a mi mesa. Ellos sonrieron. Me dieron la mano y me dijeron cuan felices estaban de ver esta mesa. Una mujer policía me dijo que había hecho un retiro de meditación en Vrindavana y Varanasi. Estaba muy emocionada de obtener algunos libros. Después de dar una donación, compró más libros para otros policías.
Estaba pensando en el cambio de hace algunos años, cuando los policías algunas veces perseguían a los distribuidores de libros. Ahora, la policía a veces se nos acerca con alegría y amistad. Brighupati Prabhu dice que una señal de que el mundo está cambiando es que los policías de América van a Vrindavana a meditar.
Su sirviente,
Jaya Chaitanya Dasa
Estados Unidos
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