Bhakta Dheshan es de Sudáfrica y distribuye libros desde el 2008. Estudió Tecnología informática en Durban, y después se mudó a Johannesburgo, donde se unió a ISKCON.
¿Por qué es tan importante distribuir los libros de Srila Prabhupada?
Porque así lo enfatizó Srila Prabhupada en sus charlas, cartas, libros, etc. Si Srila Prabhupada hubiera enfatizado otra actividad, entonces le daríamos prioridad a ese servicio. Srila Prabhupada dijo que los libros son la base y la prédica es la esencia.
Sabemos que Srila Prabhupada trabajó arduamente cada noche mientras el resto del mundo dormía para poder darle este depósito de conocimientos sobre la Verdad Absoluta. Srila Prabhupada tradujo el Srimad-Bhagavatam hasta su último aliento para nuestro beneficio.
Y nosotros debemos tomarnos muy en serio la distribución de estos libros en agradecimimento a los esfuerzos de Srila Prabhupada, por todo lo que sacrificó para producirlos. Tal como él dijo, todos se pueden beneficiar de esta actividad por ver, tocar, adquirir, leer y distribuir estos libros!
Además, el mensaje y la pureza del proceso de la conciencia de Krishna permanecen en estos libros tal como los impartió Srila Prabhupada, y así pueden transmitirse tal como son, a pesar de que nosotros lleguemos a explicarlos de forma incorrecta, parcial, etc., cuando distribuimos libros o predicamos. Y cuando distribuimos libros, la persona se lleva a Krishna a su casa y de esa forma permite que Srila Prabhupada le predique y le dirija al camino a Krishna.
¿Cuándo empezaste a distribuir libros?
Comencé aproximadamente en el 2008, cuando me uní formalmente a ISKCON y empecé a acudir al templo y a los programas nama-hatta.
Antes de ello, conocí la conciencia de Krishna a través del libro La ciencia de la autorrealización. Durante años estuve leyendo muchos libros más e intentando dejar de comer carne, comencé a cantar japa, etc. Esto fue antes de poder reunirme regularmente con los devotos y comenzar a visitar los templos.
¿Te gustaría contarnos alguna historia especial que te haya ocurrido mientras distribuías libros?
En este esfuerzo no hay pérdida ni disminución alguna, y un pequeño adelanto en esta senda puede protegerlo a uno del peligro más temible de todos (Bhagavad-gita 2.40). Uno de nuestros amigos, Sam (descendiente de escoceses), ha aceptado de buena manera la conciencia de Krishna. Es muy receptivo en cuanto a escuchar la filosofía, cantar, observar ekadashi y otros días de ayuno, etc. Tiene algunos primos en Escocia que forman parte de las tropas del ejército enviadas a Afganistán. Durante uno de sus descansos, fueron a visitar a Sam en Johannesburgo.
Sam tenía unos libros y revistas que le habíamos dejado, y sus primos los vieron y le preguntaron de qué se trataba. Él acabó dándoles casi todos los libros y revistas, y sus primos regresaron a la base y distribuyeron los libros de Srila Prabhupada entre los demás soldados. Apenas se quedaron con un Bhagavad-gita.
Poco tiempo después, fueron atacados. Por suerte, consiguieron salir con vida del ataque; lo más interesante es que uno de ellos llevaba el Bhagavad-gita en su mochila, y la metralla que lo golpeó perforó el libro. Esto lo salvó de ser herido o algo peor. Sam dice que sus primos aún conservan el libro con las heridas de guerra de aquel día. Ese Bhagavad-gita se convirtió en el amuleto de la suerte de los soldados, y los acompaña allá donde van. Este es un ejemplo más de cómo los libros de Srila Prabhupada están literalmente salvando las vidas de las almas cada día en el mundo entero.
¿Qué te inspira a distribuir libros? ¿Cuáles son los mayores desafíos en tu servicio?
Satisfacer a Srila Prabhupada es la fuerza que impulsa la distribución de libros, así como ver otros devotos que se esfuerzan mucho para salir y hacerlo. Eso me inspira a realizar este servicio más y más.
Creo que el ego falso, preocuparse por los resultados y ser introvertido o tímido, afecta un poco en el servicio; pero una vez que se va a la calle con los libros y los devotos, se pueden superar estos obstáculos y purificarse con sankirtana. De esta forma, estos desafíos son buenos, porque nos recuerdan que necesitamos purificarnos y corregirnos, y que Krishna es el único hacedor y nosotros apenas somos Sus instrumentos.
Asimismo, nuestros compromisos a veces nos complican salir a sankirtana, pero tenemos que organizarnos para hacer de las actividades de sankirtana nuestra prioridad, y utilizar las diferentes técnicas de prédica para asegurarnos que los libros se distribuyen de una manera u otra.
¿Qué le aconsejarías a alguien que se quiere ocupar en sankirtana?
Que no lo piense o analice demasiado, y que tampoco sienta miedo o timidez: toma unos cuantos libros, ora a Srila Prabhupada y al Señor Chaitanya Mahaprabhu, y sal a conectar con las personas. Cuando salimos a sankirtana ocurren cosas increíbles, y conectamos con almas maravillosas. También es bueno salir en equipo, especialmente con devotos que distribuyen libros de forma regular y pueden enseñarte algunos trucos y hacer que la actividad sea divertida y emocionante.
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